domingo, 24 de enero de 2010

No quiso llamarse Sebastián

Por ahora es Cipriano Tomás o Beltrán. No se quiere quedar con ningún nombre.
Construyo: descendiente de un alemán -su abuelo-, llegado en medio de la Segunda Guerra, Abuela criolla, bisabuelo materno de nombre Cipriano.
Padre muerto casado con Raquel (de religión judía), así que su madre lo educa en el judaísmo y actualmente mantiene vivas las viejas tradiciones. Hijo único. Tiene 33 años en 2006.
Forma: estoy viendo, escribo en un cuaderno para seguir el ritmo de un discurso retórico de respiración pausada. pretendo una combinación de recursos, el retórico y no sé bien qué, probablemente escenas "domésticas" con diálogos y sin acotaciones. El cierre del capítulo debe ser la entrevista en TV, y luego, la caminata por la costanera.
Introspección.

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