Va y se me da por leer contemporáneso y agarro Inglaterra de Leopoldo Brizuela y me encuentro con que los capítulos, la forma en que están trabajados son la respuesta al problemita con el que ando sobre el tiempo narrativo. Es que tengo: Una acción principal y dos acciones secundarias que se desprenden de la principal. Una en 1995, la fuga, los asesinatos, la captura, las fotos que no fueron de Amancio (y la derivación al pasado a partir de esas fotos); la otra en 2000, las pericias psiquiátricas; y la tercera en 2006 cuando falla la corte en contra de la provincia, aunque también podría ser en 2009, porque ya casi casi todo termina.
Qué bueno debo ir muy bien porque estoy en la etapa de la confusión que es la segunda etapa, según los novelistas.
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